Nace en Colombia la feria de arte ARTBO en el 2004 y, arranco, como una respuesta a las necesidades del sector, del desarrollo artístico y cultural del país. esta feria internacional, ha permitido abrir una gran ventana en este eje del planeta en la que se han podido mostrar y descubrir todo ese inmenso talento nacional e internacional y a todos aquellos que como nosotros disfrutamos y aprendemos del arte en todas sus formas y manifestaciones y como era de esperarse, esta buena feria madre que en su momento solo se desarrollaba en el recinto de Corferias, ha tenido varios hijos entre ellos la feria de arte Barcu que nace en el 2014, Bogotá arte y cultura cuyo primer objetivo era llevar el arte a la gente, desde unos espacios menos convencionales, menos pretenciosos, que le permitieran a las personas encontrarse en espacios diversos con las bellas características de las casonas del centro histórico y cultural de Bogotá, un arte más cercano por así decirlo que las personas lo sintieran más suyo, más al alcance de todos los que lo disfrutamos de una manera menos rígida y formal.
En nuestro caso fuimos aceptados e incluidos como espacio independiente, como parte del recorrido de la feria, pero con nuestra propia propuesta y despojados de cualquier sentimiento de carácter comercial, mucho más enfocados en abrir espacios a artistas emergentes y otros si consolidados que decidieron creer en nuestra filosofía y vocación del espacio.
Cabe anotar que parte de nuestro trabajo permanente es ayudar a los artistas a desarrollar su obra plástica y estructurar proyectos particulares o institucionales.
Así pues, desde hace varios años y en el marco de la semana del arte abrimos las puertas de nuestro taller ubicado en el centro histórico como parte de la feria de arte Barcu, e invitamos a hacer un recorrido mágico en el que vas a descubrir la obra de maravillosos artistas que han sido seleccionados para participar en esta muestra maravillosa, cuyos trabajos son verdaderamente nutritivos si de alimentar la imaginación y el espíritu se trata, la feria es realmente digna de esta ciudad diversa e incluyente, recorridos guiados, espacios llenos de pinturas, esculturas, arte callejero, performances, nuevos talentos, gastronomía, una feria llena de colores y sabores y en general todos los espacios culturales, restaurantes, museos etc., están o son parte de un bello recorrido de la Bogotá llena de historias y cultura, hoy por hoy otros hijos de Artbo e incluso el mismo Artbo han adoptado sabiamente la costumbre de sacar la feria a la calle, salirse de la majestad del recinto ferial y llevar a los circuitos, las zonas, los barrios en los que las galerías y los espacios del arte se han conectado en un modelo asociativo donde el principal y mayor beneficiario es el público, cuyas opciones de disfrutar el arte están a la vuelta de la esquina. Como consideración personal creo que el formato de BARCU ha sido replicado en múltiples ferias de arte y creo que es su mayor aporte en el entendido que el arte además de cultura es educación y desarrollo social. Es un verdadero orgullo hacer parte de esta historia.